BOE, CINE Y FRANQUISMO

Portada del libro de Raúl César Cancio “BOE; CINE Y FRANQUISMO” que fue presentado por su autor el pasado martes 15 de noviembre. (Clic en cualquiera de las imágenes para verlas ampliadas)

BOE, CINE Y FRANQUISMO

El pasado martes 15 de noviembre pudimos asistir a otra de esas tardes mágicas que desde hace tiempo organiza la asociación Gefrema en el monumental coso del colegio Lourdes también conocido como “El Santuario”. En esta ocasión lidiaba en solitario el afamado y popular Raúl Cesar Cancio “Supremo”, que lidiaría ejemplares de la afamada ganadería de la “Dehesa de Santa Isabel”, vacada conocida también por los aficionados como “La Filmoteca”. Una ganadería que da mucho juego y que se suele prestar al lucimiento de los toreros, máxime cuando el lidiador es una primerísima figura como en el caso que nos ocupa.

“La vida en un hilo” una película de Edgar Neville.

La plaza presentaba algo más de media entrada, algo difícil de entender dada la categoría tanto del diestro como de la temática a lidiar. Aún así allí estaban algunos de los más destacados aficionados y diestros de la afición gefremera, bastión irreductible de los buenos aficionados a la gueracivilmaquia. Entre ellos “Modesto”, “Sandoval”, “Finito de Hortaleza” que filmaría todo el festejo, Cardenal, “Presidente”,”Cubanito”, “Verderón”,”Sundance”, así como la presencia de la mozo de espadas del maestro “Espoleta”, su inseparable “Charquitos”, entre otros muchos buenos y fieles aficionados. Pero destacando entre todos estos aficionados y sin desmerecer a ninguno, debemos reseñar la presencia del indiscutible número uno del palmarés de la fiesta, el único, el inigualable, el ya mítico “Moncloveño”, que tuvo que dedicar un buen rato a firmar autógrafos a los aficionados que se arremolinaban a su alrededor tras su apoteósico triunfo del día de La Almudena, hecho este que provocó que el paseíllo comenzara con un poco de retraso sobre el horario previsto.

“El santuario no se rinde” una de las películas épicas ambientadas en la Guerra Civil rodadas en los primeros años del franquismo.

Antes de narrarles lo que dio de sí la faena quiero hablarles de este aquilatado diestro, cuya trayectoria es sobradamente conocida por la mayoría de los aficionados, pero en deferencia a los numerosos aficionados de todo el mundo que cada día en mayor número se asoman a estas páginas, haremos un pequeño y breve inciso. Raúl César Cancio es un diestro cuyas actuaciones se cuentan por clamorosos triunfos, ha lidiado en diferentes plazas enfrentándose a diversas y variadas ganaderías, y sería muy largo reseñar todas ellas por lo que nos vamos a ceñir a su relación con la asociación Gefrema. Hace años publicó en la revista Frente de Madrid un interesante artículo sobre la actividad y vicisitudes del Tribunal Supremo (del que el autor forma parte como letrado) durante la Guerra Civil.

Tal vez la escena más polémica de Viridiana de Luis Buñuel, que sería premiada con la Palma de Oro en Cannes.



Más adelante Raúl César Cancio publicaría otro colosal artículo sobre la Guerra Civil de los Estados Unidos y el tratamiento legal que se da a los restos patrimoniales de aquel conflicto, un artículo que debería ser leído por nuestras administraciones dada la escasa protección que existe sobre los restos patrimoniales en nuestro país. Posteriormente cuajaría una de las más aclamadas faenas que se recuerdan en Gefrema acompañada de una apoteósica presentación, nos referimos a su artículo también publicado en Frente de Madrid sobre la muerte de Durruti (de la que por cierto este domingo se cumple su 75 aniversario). El artículo de Cancio es un estudio detallado y conciso de todas las fuentes y teorías sobre la muerte del líder anarquista, un trabajo concluyente sobre aquel polémico episodio, que muy pocos autores hasta entonces habían tratado con la profundidad que lo hizo este inigualable diestro. Este trabajo fue el artículo central del número 15 de Frente de Madrid, y en su presentación se congregó un buen número de aficionados que abarrotaron la plaza donde fue presentado, convirtiendo aquello en un auténtico “horno”. Posteriormente cuajaría otro monumental triunfo con un trabajo sobre el “enigma del tanque de Vidal Cuadras”, al que dedicamos una crónica especial de Sol y Moscas . Y hace pocas fechas, nos sorprendió nuevamente con un excepcional trabajo sobre los últimos días del Madrid republicano, en el último número publicado hasta ahora de Frente de Madrid. Los buenos aficionados están de suerte, ya que según se anunció ayer durante el festejo, el artículo central del próximo número de Frente de Madrid llevará la firma del afamado diestro de La Salesas. En esta ocasión el artículo estará centrado en el edificio de la Telefónica en la Gran Vía, y en toda la actividad y diferentes historias que se vivieron en el interior de este singular edifico madrileño durante la guerra. Como pueden ustedes comprobar, “Supremo” no es un diestro que se arrugue ante nada, muy lejos de esas figuras de postín acostumbradas a torear siempre las mismas ganaderías comerciales, sin exponer ni una miajilla.

“Raza” dirigida por Saénz de heredia sobre un guión del general Franco que lo firmó con el pseudónimo de Juan de Andrade.

En la conferencia de ayer, el diestro tuvo oportunidad de presentar a la entregada afición gefremera su último libro, un trabajo en el que nos presenta la relación entre el mundo del cine en España con la legislación y normativas específicas que durante el régimen franquista se articularon para su control, un libro que no debe faltar en sus estanterías. El libro lleva por titulo “Boe, cine y franquismo“, que puede llevar a engaño y hacer pensar que se trata de un trabajo técnico dentro del ámbito del derecho. Después de lo visto ayer podemos afirmar que nada más lejos de la realidad.

“Turbante blanco” película rodada en 1943 dirigida por Ignacio F. Iquino. Esta sería la primera película en la que intervino Fernando Fernán Gómez, y en ella también actuaba Raúl Cancio, abuelo del autor el libro.

Como decíamos anteriormente comenzó el festejo con un poco de retraso debido al revuelo que provocó la irrupción de “Moncloveño” en los tendidos. Vestía el diestro un elegante terno con chaquetilla en marengo, no en vano este diestro destaca por la pulcritud y elegancia en el vestir en la plaza, y sin apenas despachar algunos pases de recibo, se fue directamente a lancear al centro del redondel, donde comenzó a ligar tanda tras tanda de sublimes pases. Desde el primer momento el maestro marco claramente los tiempos de la lidia, remarcando los diferentes periodos que se puden diferenciar durante todos esos años, demostrando la influencia directa e ineludible, que desde los diferentes poderes se ejerció sobre la actividad cinematográfica.

“El pisito” una película con mucha carga crítica dirigida por Marco Ferreri.

Algunos pensábamos que el diestro iba a basar su faena en el abuso de las tediosas “decretinas” pero afortunadamente estábamos en un error, ya que la exposición del maestro fue todo un ejemplo de cómo lidiar un morlaco como este, no en vano este maestro tiene ya muchas tablas y se las sabe todas. Pase a pase y película a película, que “Supremo” iba utilizando como ejemplo cada una de ellas, fuimos recorriendo el largo periodo comprendido entre la Guerra Civil y los años setenta de la mano de películas como “el crucero Baleares”, “Plácido”, “El verdugo”, “Rojo y negro”, “Viridiana”, “A mi la legión”, “Raza”, entre otras muchas, o de directores como Benito Perojo, Buñuel, Juan de Orduña, Bardem, Sáenz de Heredia, así como los principales actores: Alfredo Mayo, Amparo Rivelles, Imperio Argentina, Fernando Fernán Gómez o Paco Rabal entre otros muchos, sin olvidar al abuelo del autor, que trabajó como actor, guionista e incluso de director en algunas películas.

“Una película de fondo católico que asombrará por su crudo realismo” así se anunciaba la película “Balarrasa”, parte de cuya trama transcurre durante la Guerra Civil.

Solamente con esto sería suficiente para abrir de par en par la puerta grande, pero a todo ello hay que sumar el incomparable temple de este diestro, su dominio en el tempo y cadencia de los pases, la ligazón que realiza entre unos y otros lances logrando mantener la atención de los tendidos, en fin, todo un ejemplo de lidia para los buenos aficionados a este noble arte de la guerracivilmaquia. Terminó el maestro de las Salesas su actuación de soberano estoconazo, sin haber colocado prácticamente al toro en suerte, que fue respondida por una clamorosa ovación desde los tendidos que se poblaron inmediatamente de pañuelos blancos, mientras retumbaban las paredes con sonoras aclamaciones de ¡¡torero, torero!!.

“La conciencia acusa” un melodrama con trasfondo religioso.

Tras esta monumental faena y como es habitual en “El Santuario” durante los festejos organizados por Gefrema, dio comienzo el tradicional debate-tertulia con su ya legendaria profundidad y criterio, lo que los convierte por derecho propio en un referente en el mundo de la guerracivilmaquia. Una vez soltada la vaquilla para permitir el lucimiento de los aficionados que lo tengan a bien, el primero en saltar a la arena fue “Presidente” que agradeció al diestro su evocación de aquellos años, que de alguna forma le habían trasladado a aquellas tardes de cine de barrio y programa doble de su infancia, algo en lo que coincidieron la mayoría de los presentes, excepto “Charquitos” y “Moncloveño”, que debido a su esplendorosa juventud desconocían a que se estaba refiriendo. Intervino después “Cubanito” que demostraría a lo largo de la tertulia un sólido y contrastado conocimiento del tema.

“El verdugo” una cruda sátira sobre la realidad social de la España de la época.

Serían muchas las intervenciones a reseñar, casi todas muy brillantes al igual que la replica en los quites del maestro Cancio, y muy largo el comentar todo los que se habló durante la hora larga que duro el ameno coloquio, así como todas las anécdotas que salieron a debate, una de las más curiosa fue la existencia de una famosa productora de los años 50, reconocido y consentido refugio de “rojos” que respondía al nombre de Productora Cinematográfica Española, cuyas siglas eran ni más ni menos que P.C.E. .

“Sor Citroen” una de las muchas películas de los años sesenta que contaban con religiosos entre sus personajes principales.

Pero si hubo un espontáneo que destaco ese fue Sandoval, desde los primeros compases se fue a por la vaquilla y no había forma de quitársela de querencia, nos recordaba a nuestro admirado, y ayer añorado, el genial “Cuatro Vientos”. No había manera de que la dejara tranquila, al final casi no se sabía quien estaba lidiando, menos mal que en un par de ocasiones “Moncloveño”, que estaba en todo momento a su lado, consiguió atemperarle de manera que “Supremo” pudo recuperar la dirección de la lidia, si no hubiera sido así, Sandoval que es un cinéfilo de pro, se habría llevado la vaquilla a casa. Y por supuesto destacar también las siempre brillantes y sublimes intervenciones de ese auténtico titán de la guerracivilmaquia que no es otro que “Moncloveño”, autentica figura por antonomasia de nuestra querida fiesta, e indiscutible número uno del escalafón.

“La prima Angélica” una película de Carlos Saura con una temática poco habitual para su época.

Y esto fue todo amigos lectores, cuando desde la presidencia se declaro concluido el festejo, los aficionados saltaron entusiasmados al ruedo para alzar en hombros al maestro de la Cuesta de Las Salesas y sacarlo por la Puerta Grande, donde aguardaba una enfervorizada masa de aficionados que le recibieron con gritos de ¡¡torero, torero..!!. Una afición que queda expectante de ver nuevamente actuar a este diestro en la próxima faena que fue anunciada ayer con toda solemnidad, de ver actuar a este maestro que derrocha técnica y arte en cada una de sus apariciones y que cuenta sus actuaciones por rotundos éxitos. Un torero que torea como tiene que ser, por derecho.

Florentino Areneros.

“La Vaquilla” según Don Carlos Sala, todo un experto en la materia que habla con conocimiento de causa, la mejor película rodada sobre la guerra civil. Aunque el guión de Berlanga y Azcona se escribió durante el franquismo, no se rodaría hasta 10 años después de la muerte del dictador.