martes, 27 de abril de 2010

EL GRAN EVENTO

"EL GRAN EVENTO"

El fenomenal cartel anunciador del gran evento realizado por ese pedazo de artista en todas las ramas de las artes que es el maestro "Espoleta". (Haga doble clic sobre la imagen para ver ampliado).


Huérfana estaba la afición cada día más numerosa a la gefremaquia desde aquel ya mítico domingo en el que “Moncloveño” fuera sacado a hombros por la Puerta del Río (pocas jornadas después de que esta fuera gallardonada), tras consumar una de las faenas más completas, monumental y artísticas que se recuerdan. Todavía retumban los ecos de las ovaciones y atronadores oles, que premiaban aquellos soberbios pases y esos taurinos momentos que pudimos contemplar en aquella memorable ruta de los Escudos de la República cuyas imágenes permanecen inalterables en nuestras retinas y corazones.

Pero queridos lectores, esta larga y dura travesía del desierto ha llegado a su fin, ya los buenos aficionados cuentan con ansiedad los segundos que faltan para que “Moncloveño” vuelva a pisar el albero. Desde que se filtró la noticia (todas las sospechas fehacientes apuntan a la Peña Casado) un run-run imparable recorre la Villa y Corte. Las largas filas de aficionados tratando de conseguir entradas tras pasar varias noches al raso, algo que no recuerdan ni los más viejos del lugar, las referencias al ansiado evento copan las portadas de la prensa y abren los informativos de radio y televisión. Todo hace presentir que estamos ante un gran evento.

El diestro de la Cuesta de Areneros, un torero que siempre se ha entregado dándolo todo en el ruedo, conocedor de esta gran responsabilidad, se esta preparando física y mentalmente para no defraudar a esta afición a la que tanto ha dado y a la que tanto debe. Como apoderado suyo que soy puedo dar fe de ello. Bien es cierto que este jovencísimo diestro ha pasado momentos muy malos, y a punto ha estado de cortarse la coleta en más de una ocasión debido a la ingratitud y a las puñaladas recibidas fuera de los ruedos, pero este émulo de José Tomás de la moderna gefremaquia no descargará la suerte en ningún pase aun a riesgo de una grave cogida. “Moncloveño” ha pasado muy malos momentos, como apoderado suyo que soy lo puedo afirmar con rotundidad, pero con el apoyo de los amigos lo esta superando, aunque bien es cierto que episodios como el de su aparición no deseada en la prensa del corazón le ha hecho mucho daño, “Moncloveño” es un joven con un físico excepcional, con una figura estilizada que parece sacada de un molde de una escultura de Miguel Angel, facciones perfectas y radiante sonrisa, abundante cabellera, a lo que une su simpatía y cordialidad inigualable, un adonis del siglo XXI vaya. Pero también una víctima perfecta para los carroñeros de la prensa rosa, que malintencionadamente han inventado falsos romances de este torero con distintas artistas del candelabro que están empezando y quieren aprovechar el tirón mediático de este valiente para promocionarse. Quizá el caso más sonado haya sido el que le atribuía un apasionado romance con Elsa Pataky. Y les puedo confirmar que esto último ha hecho mucho, pero que muchísimo daño a “Moncloveño”, sobre todo cuando le tuvimos que confirmar que era mentira.

Pero “Moncloveño” es joven y fuerte, y sabrá superarlo. Se esta preparando mentalmente leyendo los tratados de psiquiatría de Vallejo Nájera, realiza largas sesiones diarias de toreo de salón y por lo menos una vez a la semana se desplaza a la dehesa a tantear alguna vaquilla. Aunque donde destaca es en la excepcional preparación física que esta realizando, con sesiones de tres hora de gimnasio diarias mínimo, lo que le permite lucir unas chocolatinas abdominales que sería la envidia del fofo vientre de Ronaldo y que podrían competir sin ningún complejo con las del mismo José María Aznar. Cualquier tarde que nos desplacemos a su finca del Parque del Oeste le podemos ver subir en fulgurante esprint desde el Puente de los Franceses hasta el Intercambiador de Moncloa, operación que repite seis o siete veces cada tarde sin dar muestras de resuello. Ya lo ven señores lectores el diestro que hizo famosa la afirmación de que “correr es de cobardes” nos da una lección de humildad, abnegación y sacrificio desinteresado, ¡¡todo por Gefrema!!.



Pero “Moncloveño” no torea solo, si no que lo hace no solamente acompañado de otro torero, que también, si no que lo hace acompañado de una estrella, un semidiós de la tauromaquia moderna, un mito viviente, un titán del Olimpo de la tauromaquia que se materializa en humano todos los días en la calle Sierpes a la hora del aperitivo . Que acertada ha estado la empresa organizadora del festejo al componer el cartel, no solo por estos dos pedazos de inigualables diestros, si no también al juntarlos en ese monumental coso de la Blanquerna, un trozo de la taurina Cataluña en el corazón de Madrid, que albero, que localidades, que andanadas, en fin, que monumento a la fiesta. ¿Qué más se puede pedir amigos?, ¿qué les inviten a una copa de cava al finalizar la corrida?, pues también lo tienen ustedes concedido señoras y señores lectores.

Como les relato, Rafael González Zubieta, “El Zubi”, que así se llama este fenómeno, lidiará en la Blanquerna el próximo día 10 de Mayo. Es este hombre un artista, no en vano es un gran admirador del maestro Curro Romero, artista donde los haya, pero más que admiración es casi devoción, “El Zubi” es un devoto currista. Podría escribir páginas y páginas narrando las hazañas de este diestro, pero prefiero que sean ustedes los que puedan observar en directo su magia, su poderío, su dominio de las suertes, su depurada técnica, en fin, todas las cualidades que una figura debe atesorar. Pero además “El Zubi” tiene ese duende, ese gusanillo que solo poseen los que han bebido de las orillas del Guadalquivir, y que cuando se desborda es capaz de llevarse todo por delante en una riada de arte, en una avalancha de magia, en un pedacito de gloria.
Si quieren conocer el refinado estilo de este artista inigualable, no dejen de visitar su blog, donde ayer mismo comenzó a publicar una interesantisima serie de entradas sobre la "ANTROPOLOGÍA DE LA FIESTA Y SU INFLUENCIA EN LA CULTURA HISPÁNICA" muy recomendable para todos aquellos que desconocen este aspecto indisoluble de la tauromaquia. Un buen aperitivo para los que puedan asistir al gran evento del día 10. No dejen de visitar este enlace si quieren ver en acción a "EL ZUBI":



Monumental portada del número 17 de Frente de Madrid, en el que además del artículo central podrán encontrar otros muchos no menos "monumentales".
Permítanme ahora que les hable de Lagartija, persona y amigo excepcional. Lagartija, de nombre Braulio, es un personaje entrañable del barrio donde vivo, bien conocido y querido por los vecinos de toda la vida. Su vida, llena de luces y sombras, unida a los rumores, aventuras y andanzas que se le atribuyen, unas verdaderas y otras no tanto, lo han convertido en una leyenda viva, casi un mito. En lo que parecen coincidir la mayoría de las versiones que han llegado hasta mis oídos es en sus orígenes, que unos sitúan poco antes de la guerra y algunos durante la misma, aunque lo que casi se puede afirmar con rotundidad es el hecho de que su padre fue encarcelado tras la guerra, y fallecería poco tiempo después, según unos de enfermedad, o según otros a causa de que “lo enfermaron”. Lo evidente es que se tuvo que despabilar desde muy pequeño para ayudar a su madre y abuela a sacar adelante la casa. ”Lagartija” era un muchacho muy vivo y despierto, a la vez que muy inquieto y de una gran simpatía, rara vez se le veía parado, de ahí su apodo. Siempre que se necesitaba a alguien para una pequeña tarea o un recado, allí estaba ”Lagartija” dispuesto a echar una mano a cambio de una propinilla o de un plato caliente. Y así continuaría durante toda su vida, sin oficio conocido. A veces desparecía y volvía pasado el tiempo. Había días de vacas gordas en que ”Lagartija” entraba en “Los Porrones” y pagaba varias rondas a los amigos allí presentes, aunque en otras muchas ocasiones, se acoplaba en su rincón de la barra, con la espalda en la pared, a la espera de que algún parroquiano pronunciara las palabras mágicas: “ponle un ‘chato’ a Braulio de mi parte”. Porque ”Lagartija” tenía sus debilidades y pasiones, como todo buen cristiano. Una eran los chatos de vino y su liturgia, otra el Real Madrid, otra los toros, materias ambas de las que siempre sentaba cátedra cuando surgía la conversación, y la otra, la más inconfesable, las mujeres. Nunca anduvo falto de ninguna de ellas, en sus días malos siempre había alguien dispuesto a pagarle un tinto, y aunque nadie sabía el misterio era extraño el partido o corrida a la que no asistía, la mayoría de las veces sin pagar un duro. Con las mujeres, y aunque nadie tampoco conocía el secreto, también gozaba de gran predicamento, y se comentaban como ciertos múltiples romances, incluyendo entre las numerosas conquistas que se le atribuían, el de una famosa actriz americana, aunque el nunca quiso confirmarlo ni desmentirlo, pues según mantenía, “un caballero nunca debe comentar ciertas cosas”, y si en otros aspectos de su vida nunca fue muy explicito en el comentario, en este siempre fue una roca. La vida de ”Lagartija” daría para una novela, incluso dos, pero hoy les quiero hablar de él, dado que ”Lagartija” posee un don. Son muy pocas las personas que saben de ello, incluso hasta el mismo lo desconoce, así como la mayoría de sus amigos, que son muchos. Este don de”Lagartija”fue descubierto por el que seguramente sea su mejor amigo, el Gallego, de nombre Joaquín. Otro personaje que su vida daría para varias novelas y que al igual que ”Lagartija” vería su vida marcada por la guerra. Aunque era conocido por el Gallego, realmente era natural de León, de una pequeña aldea en algún lugar cercano a Ponferrada. Perdió a sus padres en los primeros días de la guerra quedando a cargo de una tía. Un día siendo un chaval viajó a Madrid acompañando a un camionero que transportaba carbón a una finca de la calle Ferraz, donde el dueño de una tienda de ultramarinos le ofreció trabajo, y aquí se quedo hasta el final de sus días.


Alguno de los famosos diestros que han prometido asistir al gran Evento del día 10 en Blanquerna.

“El Gallego” y “Lagartija” hicieron rápidamente buena amistad, además de su edad, eran muchas las cosas que les unían, llegando a ser casi como hermanos. Y sería su amigo quien descubriría el don oculto de “Lagartija”. Según afirmaba el Gallego,”Lagartija”tenía que haber nacido en una noche de San Juan en que hubiera luna llena. Cuando se cumplen esas dos condiciones es cuando las meigas viajan hacia el norte, hacia San Andrés de Teixido, donde en una cueva cercana, sobre el acantilado, realizan su aquelarre. Si en su camino coinciden con un recién nacido, descienden hasta rozarlo con sus faldones y le conceden un don. Algunos pueden predecir el futuro, otros presienten la muerte en las caras, y a otros les acompaña la fortuna, entre otras gracias, pero la mayoría no son conscientes de que lo poseen.

Sería “El Gallego” el que se daría cuenta de este poder sobrenatural de Braulio. Observó que siempre que ”Lagartija” se rascaba el omóplato, el derecho, se iba a producir un acontecimiento excepcional. Lo comprobó por primera vez un día mientras tomaban el habitual chato y vio como ”Lagartija” se rascaba el omoplato, el derecho, esa misma tarde el Madrid ganaría su primera Copa de Europa. Y así seguiría ocurriendo con cada una de las que ha ganado este equipo, con las grandes tardes de las Ventas, con los partidos memorables, y con tantos y tantos acontecimientos reseñables, incluido cuando a Antonio, el fontanero, le tocaron los catorce en la quiniela. Cualquiera de esos días “el Gallego” había observado a ”Lagartija” rascarse el omóplato, el derecho. Sería sonado aquel día en el que Lagartija, presa de un terrible picor se rascaba el omóplato, el derecho, sobre la esquina de uno de los arcos centrales de Los Porrones en aquel caluroso verano de 1982. “El Gallego” lo interpretó como evidencia indiscutible de que España ganaría el Mundial, el de Naranjito. Sin embargo esa misma tarde saldrían por la Puerta Grande de Las Ventas Francisco Ruiz Miguel, José Luis Palomar, Luis Francisco Esplá y el ganadero Vitorino Martín, en la que fue conocida como la corrida del siglo. Este fue un secreto muy bien guardado por “el Gallego”, ya que según mantenía, en el momento que fuera conocido por ”Lagartija” el hecho de que estaba en posesión de ese don desaparecería el hechizo, y solamente se lo comento a algún amigo escogido, entre ellos mi padre, que sería quien me lo transmitiera.

El Gallego falleció hace unos pocos años, pero Braulio continua con vida, aunque es raro coincidir con él, ya que su salud le permite salir poco. Sin embargo el sábado pasado me encontré con ”Lagartija” cuando salía del mercado. Nos alegramos ambos mucho del encuentro, ya que el gran afecto que le tengo, lo sé correspondido. Charlamos largamente mientras tomábamos un chato en La Central, un día es un día se dijo, y comentamos la actualidad taurina y futbolera (es una pena que algún día se nos vaya este gran hombre sin ver ganar al Madrid la Décima). Le comenté la próxima reaparición de “Moncloveño”, que tenía anunciada su vuelta a los ruedos allá por San Isidro, lo que le produjo gran alegría dado que él siempre ha apoyado a los diestros del barrio, tanta alegría que se tuvo que pedir otro chato, un día es un día. En ese momento una extraña mueca se dibujó en el rostro de Lagartija, su cara se contrajo, su nariz se arrugó y sus grandes ojos se convirtieron en dos finos trazos horizontales. En un principio me asusté, quizá no hubiéramos tenido que tomar esos chatos. Pero rápidamente me di cuenta de lo que estaba pasando, sin proponérmelo me había convertido en una de las pocas personas que habían asistido al prodigio, uno de los elegidos que había tenido el privilegio de poder contemplar el fenómeno: ”Lagartija” se estaba rascando el omóplato, el derecho.

Señoras y señores, queridos amigos lectores, yo que ustedes no me perdería esa conferencia.

Florentino Areneros.

1 comentario:

  1. Eres un monstruo de la escritura y del sentido del humor. Dicen todos los libros del psicoanálisis, que aquellas personas que tenemos sentido del humor es que somos muy inteligentes. Pues bien tu José Antonio debes de ser la hostia, pues atesoras el de todo Madrid. Me ha encantado tu crónica taurina, jocoso y festiva. Si toda esa gracia la concentraras en tener mala leche y rajaras de alguien para hacer un traje seria la hostia y habrí que estar lejos de ti...jajajaja. Enhorabuena

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