sábado, 17 de diciembre de 2011

25 MILITARES DE LA REPUBLICA

El libro “25 Militares de la República”presentado el pasado miércoles en Madrid.

25 MILITARES DE LA REPÚBLICA
 
(ULTIMA HORA: AL FINAL DE ESTA CRÓNICA PODRÁN ENCONTRAR UNA IMPORTANTE NOTICIA)

En este mundo de la guarracivilmaquia en muchas ocasiones la información sobre los festejos y otros acontecimientos se trasmite de aficionado a aficionado, lo que provoca en alguna que otra ocasión esta información no se corresponda con la realidad, algo que sucedió con la presentación del libro “25 Militares de la República” publicado por el Ministerio de Defensa. Un aficionado amigo (del que no mencionaremos el nombre) comunicó que el pasado día 14 a las 19:00 horas harían el paseillo en el monumental e histórico santuario de la librería Marcial Pons los afamados diestros Ángel Viñas, Jesús Núñez y el gran historiador, y mejor madridista, Ángel Bahamonde Magro. Ante tamaña oportunidad a las 18:00 horas ya se encontraba el diestro de la Cuesta de Areneros en la primera fila de las taquillas el inigualable Moncloveño, con un ejemplar del libro “El Real Madrid en la Historia de España” para que se lo firmara el maestro Bahamonde. Al igual que Moncloveño, atraidos por el reclamo, allí estaban otros beneméritos aficionados como son Inés Tremis, Capa y Orwell, Sandoval finalmente no pudo asistir ya que estaba “con el griego”(sic). La decepción fue grande cuando se confirmó que ninguno de esos tres consagrados diestros lidiarían esa tarde, pero tras un momentáneo enfado los ánimos se calmaron al constatar que los diestros que iban a lidiar y principalmente la categoría de la ganadería, prometían una tarde memorable.

De izquierda a derecha contemplamos a Capa, Moncloveño, Inés Tremis, Orwell y a Cuatro Vientos charlando amigablemente con una elegante señorita.

Como era de prever se produjo un lleno hasta la bandera, en la librería Marcial Pons no cabía un alfiler, la expectación era máxima. En los abarrotados tendidos, además de los ya mencionados aficionados, se encontraban algunas de las primeras figuras de la guerracivilmaquia y del mundo de la cultura, así como algún que otro representante del estamento militar, entre todos ellos destacar la presencia del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general José Julio Rodríguez. Y por supuesto, como en cualquier festejo de categoría, allí se encontraba ese magistral torero Juan Manuel Riesgo “Cuatro Vientos”, uno de los ilustres historiadores que han colaborado en la redacción del libro escribiendo dos de las 25 biografías que recoge el volumen, el cual no paró de firmar autógrafos y de hacerse fotos con los aficionados antes del comienzo del festejo.

Con la puntualidad de un toque de diana comenzaron el paseillo los tres diestros que habrían de lidiar con el morlaco, un soberbio ejemplar de 900 páginas, marcado con el hierro del Ministerio de Defensa. En el centro se situó don Fernando Flóres Gímenez, Director General de Relaciones Institucionales del Ministerio de Defensa, a su derecha Javier García Fernández “El Panfle”, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Alicante y Director general de Reclutamiento del Ministerio de Defensa, así como coordinador del libro que allí se presentaba. En el otro extremo de la mesa se ubicaba el popular diestro Jorge Martínez Reverte, autor de libros tan conocidos como “La Batalla de Madrid”, o “La Batalla del Ebro”, o el editado recientemente sobre la División Azul, entre otros trabajos. Un diestro muy conocido del gran público, gracias a sus periódicas apariciones televisivas.



Los tres conferenciantes. (Foto Capa)

Abrió plaza Fernando Flores, que comenzó agradeciendo a García Fernández y a Martinez Reverte su presencia, así como la de los historiadores presentes en la sala que habían colaborado en el volumen, también dio las gracias por la presencia de otros historiadores en la sala, además de agradecer a los responsables de la librería Marcial Pons la organización de esta presentación, a continuación expresó su sincero agradecimiento al jefe de la JEMAD, general José Julio Rodríguez, por su presencia en el acto, terminando esta primera tanda agradeciendo al resto de público su presencia en los abarrotados tendidos.

Tras ello, Flores realizó una breve presentación de sus dos compañeros de terna y realizó una somera exposición de la finalidad del libro, que no es otra que la de rellenar ese hueco historiográfico existente sobre la figura de los militares de carrera que combatieron al lado de la República. También dio unas breves pinceladas sobre la actividad divulgativa del Ministerio de Defensa en cuanto a la Historia Militar algo olvidada a su entender. Cerró su faena recibiendo una sentida ovación de un público entregado.

Modesto y Lister, dos de los jefes del Ejercito Republicano que han “eclipsado” la labor de los militares profesionales que lucharon al lado de la República.

Saltó a la arena a continuación Javier García Fernández, el coordinador de la obra, que comenzó su faena echando flores a Flores por su decisivo apoyo, esfuerzo y sacrificio para que este libro viera la luz. A continuación agradeció a sus compañeros de mesa su presencia, así como la de los historiadores presentes en la sala que habían colaborado en el volumen, también dio las gracias por la presencia de otros historiadores en la sala, además de agradecer a los responsables de la librería Marcial Pons la organización de esta presentación, a continuación expresó su sincero agradecimiento al jefe de la JEMAD, general José Julio Rodríguez, por su presencia en el acto, terminando esta primera tanda agradeciendo al resto de público su presencia en los abarrotados tendidos.

Para García Fernández el volumen que se presentaba esa noche pretendía terminar con dos mitos establecidos hasta el momento. Por una parte el de que en la Guerra Civil se habían enfrentado un ejercito de profesionales contra un ejercito de desarrapados, algo no del todo exacto ya que poco más de la mitad de los jefes y oficiales del ejercito español permanecieron bajo la disciplina de la República (9.000 frente a 8.000), apoyando esta afirmación en datos de Salas Larrazabal. Por otro lado también acabar con la creencia generalizada de que fue un golpe del Ejercito en su conjunto, cuando realmente se trató de un golpe de estado en el que participó solamente parte de ese ejercito, no su totalidad.

El general Núñez de Prado capturado al principio de la guerra, sería fusilado por los sublevados.

Pasó después a exponer los criterios que se habían seguido para seleccionar los militares cuyas biografías se recogen en este trabajo. Por una parte los que habían desempeñado alguna actividad política, por otra los que tuvieron mando en tropa durante la guerra, y por último los que aun estando del lado de la legalidad republicana, no pudieron defenderla como el caso del los Generales Batet y Núñez de Prado, o del contralmirante Azarola, asesinados al iniciarse la guerra. También destacó la presencia de militares en las fuerzas del orden como la Guardia Civil, citando el caso de los generales Aranguren y Escobar, fusilados ambos al finalizar la contienda. Para destacar el enorme sacrificio que los militares leales tuvieron que soportar, destacó García Fernández que de los veinticinco biografiados (entre ellos figuran Aranguren, Asensio Torrado, Batet, Buiza, Casado, Cordón, Escobar, Gámir, Hernández Saravia, Hidalgo de Cisneros, Mangada, Martínez Cabrera, Menéndez, Miaja, Núñez de Prado, Pozas y Rojo), siete serían ejecutados, quince fallecerían en el exilio, y solamente tres de ellos morirían en España. También destacó alguna de las características comunes a la mayoría de los militares cuyas biografías se recogen en el volumen, como el hecho de que gran parte de ellos eran de ideología conservadora e independientes, es decir sin militancia política, así como de creencias católicas, estos militares consideraron que su deber era respetar el poder legalmente constituido. La finalización de su faena, arrancó una sentida ovación de los tendidos.

Tras la actuación de “El Panfle” saltó al albero Jorge M. Reverte, que estaba destinado a convertirse en la estrella de la tarde. Comenzó la lidia agradeciendo a sus compañeros de mesa su presencia, así como la de los historiadores presentes en la sala que habían colaborado en el volumen, también dio las gracias por la presencia de otros historiadores en la sala, además de agradecer a los responsables de la librería Marcial Pons la organización de esta presentación, a continuación expresó su sincero agradecimiento al jefe de la JEMAD, general José Julio Rodríguez, por su presencia en el acto, terminando esta primera tanda agradeciendo al resto de público su presencia en los abarrotados tendidos.

El general Pozas desarrolló una intensa labor durante la contienda al mando de unidades republicanas.

Destacar que al comienzo de su faena los asistentes pensaron que se había conectado la megafonía, menudo chorro de voz tiene este diestro. Inició su disertación señalando que este libro viene a rellenar un hueco existente, no es un trabajo de lo que se denomina memoria histórica, si no simplemente de historia. Hasta ahora la presencia de militares profesionales en las filas republicanas había sido tratada parcialmente, un trabajo en profuncdidad sobre este tema no se ha hecho en todo este tiempo, indicó Reverte. En su opinoión existe cierta alergia a tratar temas referentes a las fuerzas armadas por parte de los historiadores.

A continuación señaló que es en las plazas donde los militares se oponen al golpe donde este fracasa, la acción de las fuerzas populares no hubiera sido suficiente para evitar el éxito de la sublevación en algunos lugares como Barcelona o Madrid. A su entender el gobierno de la República cometió un grave error al disolver el ejercito existente en julio de 1936, ya que tendría que empezar de cero hasta conseguir formar otro ejercito equiparable al de los sublevados, con la única diferencia de que en el ejercito republicano se instauró la figura del comisario político que encontraba su correspondencia en los curas del ejercito franquista (aquí hay que reconocer que estuvo inspirado).

Prosiguió Reverte comentando que del ejercito republicano solo se conocía por el gran público a lo militares o jefes milicianos, como por ejemplo Lister, Modesto o Mera. Destacó el papel de Miaja a lo largo de toda la guerra, ya que según sus palabras Miaja fue el único general capaz de vencer a Franco en campo abierto, lo que ocurrió durante lo que el denominó “Batalla de Valencia”, donde el general asturiano contaría con la inestimable colaboración de los militares profesionales Matallana y Menéndez. También habló de Vicente Rojo, junto con Miaja artífice de la defensa de Madrid, señalando que Rojo tenía un perfil más “técnico”. Achacaría a Rojo el error de desencadenar la Batalla del Ebro, teóricamente iniciada para evitar la caída de Valencia, algo innecesario ya que la ofensiva franquista sobre Valencia había ya fracasado gracias a la labor de Miaja.

El general Miaja, para Jorge Martínez Reverte el único mando republicano que fue capaz de vencer a Franco en campo abierto.

Hasta ese momento la exposición de Reverte reunía diferentes opiniones muy matizables, pero tal vez su parte final dedicada al final de la guerra fue la que dejó más titulares para la polémica. A su entender la división en dos de la zona republicana, impidió que existiera una comunicación real entre ambas, lo que supuso una perdida de confianza y una consiguiente ruptura política, cuya consecuencia sería el golpe de Casado, que contaría con el apoyo de un buen número de militares y políticos. Quizá este punto fue el menos claro de toda la conferencia de Reverte, lanzo diversas hipótesis y afirmaciones pero sin concretar, dando la sensación en algún momento de que para él la sublevación de Casado fue una consecuencia lógica y predecible del desenlace de la guerra, ya que según sus palabras tanto Azaña como Rojo eran partidarios de finalizar la guerra y deciden no regresar a España tras la caída de Cataluña. Como les digo, este tramo final de la presentación de Reverte no quedo lo suficientemente claro y definido, aunque a muchos de los presente nos dio la sensación de que quería realizar una cierta apología de la actuación de Casado y los que le apoyaron, y tal vez una crítica soterrada al papel de Negrín y los comunistas en su obstinación, aunque como les digo esto es una opinión subjetiva.

Finalizó su faena señalando que echaba en falta la presencia de algunas biografías en el volumen como por ejemplo la de Matallana, y proponiendo un tema a desarrollar a partir de la publicación de este libro: la desafección de gran parte de los militares republicanos profesionales, teoría que sostiene el coronel Fernando Puell. Cerró de certera estocada, en la que reclamaba dejar de una vez la tan traída memoria histórica, para entrar definitivamente en lo que todos conocemos por historia. Los tendidos mientras se procedía al arrastre del morlaco, prorrumpieron en una clamorosa ovación.

El Campesino, Miaja y Matallana.

Comenzó el turno de preguntas y se produjo una de las sorpresas de la tarde con la irrupción en el albero de Don Gregorio Gutiérrez, presidente de la Asociación de Aviadores de la República, un chaval de noventa y cinco años, rebosante de vitalidad y de una lucidez envidiable, que se fue a los mismos medios, junto a los diestros, para saludar a los maestros y comentar alguna vivencias a los asistentes, que puestos en pié le agradecieron sus lances con una ovación que hizo temblar los cimientos del coso, mientras agitando pañuelos blancos coreaban “torero, torero”. Nuevamente los asistentes tuvimos ocasión de asistir a uno de esos instantes “cuando te habla la historia”.

Don Gregorio Gutierrez, Presidente de la Asociación de Aviadores de la República, durante su apoteósica intervención.(Foto Capa)

La tibieza o indefinición de Reverte, en algunos momentos de su faena, sería sacada a la luz por uno de los asistentes, el cual achacaría a Reverte el ser un poco partidista, o por decirlo de otro modo, su obstinación en atacar a los comunistas. Reverte, visiblemente contrariado, declaró que de ser anti algo, lo único que sería es antifranquista, y derivó el tema al acta de la Junta de Defensa descubierta por Reverte que apunta directamente a comunistas y anarquistas como “consentidores” de los sucesos de Paracuellos. Reverte contraataco preguntando si lo correcto hubiera sido no publicar ese acta, entablándose un breve intercambio dialéctico entre Reverte y su interlocutor, que dijo llamarse Nacho Montejo y reconoció que tanto un abuelo como un tío suyo fueron ejecutados en Paracuellos (el servicio de documentación de Sol y Moscas nos confirma que Montejo es abogado, y fue una de las personas que milagrosamente salvó la vida durante el atentado de los abogados laboralistas de Atocha). Montejo recriminó a Reverte el cargar la responsabilidad en Carrillo, algo que el interpelado negó haber hecho. La polémica terminó en cuanto Montejo utilizó el socorrido recurso de: “a que te achucho a Viñas”, que finalizó con este interesante intercambio (Montejo apuntó a un artículo de Viñas publicado el sábado anterior a la presentación que ustedes pueden leer haciendo clic aquí). Durante estos encendidos momentos, vimos a un inquieto Orwell revolverse en su localidad, tanto que apunto estuvo de saltar al albero a sofocar esta rebelión en la granja.

Uno de los asistentes, que protagonizaría un encendido intercambio dialéctico con Reverte.(Foto Capa)


Hubo alguna intervención más, destacando una del inigulable Juan Manuel Riesgo “Cuatro Vientos”, que dio rienda suelta a su desbordada, y en esta ocasión diplomática, oratoria, aunque bien es cierto que en esta ocasión le vimos un poco más comedido que en otros debates, aunque no perdió la oportunidad de volver a sacar el tema de la desestructuración que se ha realizado con los fondos y exposiciones del Museo del Aire. También se realizó una pregunta sobre la figura de almirante habilitado Buiza, donde Reverte acusó a este de abandonar con la Flota España dejando a su suerte en Alicante a 20.000 personas, algo que a muchos asistentes nos chocó, ya que entre la salida de la Flota y los sucesos de Alicante transcurrió prácticamente un mes. O no se explicó bien, o no nos enteramos, a saber. Cerró el turno de quites “el Panfle” para recalcar a Reverte, que el hecho de no haber incluido a Matallana, estaba influido, entre otras razones por la sospecha de que Matallana fuera un colaborador franquista, un infiltrado vaya, ya que si no fue así como se explica que a los pocos meses de finalizar la guerra gozara ya de libertad.

En líneas generales una presentación interesante, sobre todo por el indudable interés que este libro ha despertado entre los buenos aficionados, no solo por su contenido, si no por las posibilidades que el tema ofrece, tal vez se le pudiera haber sacado más rendimiento al debate posterior, Cuando consigamos digerir sus 900 páginas les haremos una breve reseña. Destacar que el precio, 25 euros, esta bastante bien y advertir a los aficionados que se ha realizado una tirada de solamente 1500 ejemplares, y con el cambio de tiempos políticos, mucho nos tememos que no se reeditará en el futuro.

ULTIMA HORA:

Portada del número 20 de Frente de Madrid que se presentará el próximo miércoles 22 de Diciembre de 2011.

PRESENTACIÓN DEL NÚMERO 20 DE LA REVISTA FRENTE DE MADRID.

Estimados lectores tengo el honor de comunicarles una grata y muy esperada noticia, la presentación del número 20 de Frente de Madrid, esa sin par publicación editada por la benemérita asociación GEFREMA desde hace varios años y que no debe faltar en las estanterías de ningún buen aficionado a la guerracivilmaquia. En esta ocasión la revista está dedicada a uno de los edificos más emblemáticos y significativos de la ciudad de Madrid: la Telefónica. Durante la guerra, este edificio tendría un destacado protagonismo tanto desde el punto de vista civil, como desde el militar, aunque no desvelaremos más datos, que ustedes podrán conocer si se acercan a la presentación o leen la revista.

La presentación tendrá lugar en otro edifcio no menos emblemático de Madrid: el Círculo de Bellas Artes (C/ Alcalá, 42), el próximo miércoles 21 de diciembre de 2011 a las 19 horas.

El festejo, que será presentado por José María Sánchez “Pirata Roberts”, contará con una terna de lujo, compuesta por:
- José Antonio Carmona Pizarro “Arquitecto”, que tomará la alternativa y nos hablará de su artículo: “El edificio de la Telefónica: rompiendo el cielo de Madrid”.

- Antonio Morcillo López “Presidente”, un maestro de contrastado bagaje cuyas actuaciones se cuentan por triunfos que en esta ocasión lidiará el tema de ““El bombardeo artillero sobre Telefónica”.

- Raúl Cesar Cancio Fernández “Supremo”. Todavía resuenan los ecos de las clamorosas ovaciones que recogió este diestro en su ultima aparición en el monumental coso del colegio Lourdes (BOE, CINE y FRANQUISMO), y nuevamente regresa a los ruedos para bregar con la presentación de su artículo “El edificio de la Telefónica en los textos literarios y periodísticos de la Guerra Civil”. Conociendo a este diestro, auténtico Rey Midas de la guerracivilmaquia que todo lo que toca convierte en rotundo triunfo, la Puerta Grande está asegurada.

Creo haberles defraudado en pocas ocasiones amigos lectores, y en esta ocasión les aconsejo me hagan caso y se acerquen por el monumental coso del Círculo de Bellas Artes el próximo miércoles para contemplar y disfrutar de esta memorable faena, que seguro que marcará un hito en la historia de la moderna guerracivilmaquia.

PARA MÁS INFORMACIÓN HAGAN CLIC AQUÍ.

Florentino Areneros.

8 comentarios:

  1. Quite por alusiones: uno es gente de bien, de modo que las manifestaciones de casadismo, ya sea declarado o críptico, no pueden sino sublevarle...

    PD: creo que la foto de conjunto que ilustra el reportaje hace justicia a todos menos a ud., D. Floro

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  2. Felicitar a D. Flo por esta nueva crónica que tendré que volver a leer mas pausadamente pues tiene mucho jugo.

    Me parece que el Sr. Reverte hizo su papel de "polemista".

    Que rabia de no poder haber ido.

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  3. Aunque se trataba de un acto semioficial de homenaje a los militares profesionales republicanos, no entendí que para homenajear a éstos se menoscabara el papel de las milicias. Coincide con esa idea que últimamente está tan en boga de que ambos ejércitos eran equiparables en número y profesionalidad ¿?. La intervención de Gregorio Gutiérrez memorable, "Yo estuve allí" dijo, "de ustedes soy el único que estuve allí", mientras los ponentes miraban para otro lado, temiéndose acaso que relatara allí mismo "su guerra particular". Pero de todos fue el verdadero protagonista, y un lujo poder charlar con él sobre su experiencia con el Dombrowski en la Casa de Campo, sólo por eso mereció la pena.

    Como siempre una crónica apasionante Sr. Areneros

    Saludos

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  4. Muchas gracias queridos amigos por sus benévolas críticas, y disculpen por el retraso en responderles, una serie de desafortunadas circunstancias me hacen tener la cabeza en otros sitios y hasta hoy no he recordado que tenía un agradecimiento pendiente con ustedes.

    Efectivamente amiga Inés últimamente se percibe una especie de “igualitarismo” de confuso origen y que parece responder a causas ajenas a la propia Historia en sí, un fenómeno que habrá que estudiar.

    Estoy leyendo el libro y como se dijo en la presentación es manifiesta la huella de África en la mayoría de los militares que aparecen en el libro (por lo menos los que llevo leidos), una sombra alargada que puede dar pistas para entender algunas conductas posteriores. He de conocer que el libro me está gustando.

    Reciban un cordial saludo, y nuevamente mis disculpas por mi tardanza en responderles.

    Florentino Areneros.

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  5. ¿Entre los 25 no cabe Manuel Cascón Briega, último responsable de la aviación republicana y fusilado en Paterna?

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    1. Muchas gracias por su comentario. Evidentemente 25 biografías son muy pocas en comparación con el número de militares que permanecieron leales a la República, algunos de ellos como Cascón que dieron un gran ejemplo de compromiso y heroísmo. Los criterios que utilizaron en la selección los autores del libro los desconozco, y seguramente sería muy difícil la elección. Esperemos que en un futuro esta trabajo tenga continuidad y se publiquen más biografías de esos militares, anónimos y desconocidos por el gran público, que permanecieron leales a la República.

      Un saludo.

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  6. El general Sebastián Pozas NO fue fusilado al finalizar la guerra, tal como indica erróneamente el pie de foto. Falleció en el exilio en México en 1946

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    1. Muchas gracias por la advertencia, efectivamente tiene usted toda la razón, menudo gazapo imperdonable. Ya está corregido.

      Gracias de nuevo y un saludo.

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